El 18 de febrero, con motivo del Jubileo Lauretano anunciado por el Papa Francisco, la Ciudad de Monte Sant’Angelo acogió la Peregrinatio de la sagrada efigie de la Virgen de Loreto, cien años después de su proclamación como patrona de los aeronautas.
La estatua de la Virgen, «escoltada» por los soldados del Ala 32 de Amendola, fue recibida por el Arzobispo, Mons. Franco Moscone, por el Rector del Santuario, Fr. Ladislao Suchy, a cargo del clero, el alcalde, Pier Paolo d’Arienzo y los trabajadores de la ciudad: las «llaves de la ciudad» fueron entregadas a la Madre del Redentor.
Numerosos fieles acudieron en masa para venerar a la Virgen y encomendarse a ella.
A continuación se muestran algunas imágenes del evento histórico.
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