Fue creado en 1989 con el objetivo de recoger, catalogar y mostrar a los visitantes diversos objetos que testimonian la feviente devoción a San Miguel Arcángel a lo largo de tantas generaciones.
Allí se encuentran dones ofrecidos al Santuario por peregrinos ilustres y otros no tan conocidos como acción de gracias por los beneficios recibidos.
Sus sentimientos fueron expresados frecuentemente a través de un ex voto en forma de pinturas que hablan visualmente de las gracias y milagros obtenidos por la intercesión del Arcángel.
Los objetos custodiados son muchos y de diversa naturaleza.
Los más preciosos son los ornamentos litúrgicos, calices, copones, muebles sagrados, cruces, lámparas de plata, relicarios.
Muy interesantes son también:
- Una serie de piezas arqueológicas donadas por el Príncipe Felipe
- Una colección de monedas y medallas, entre las cuales algunas se hallan algunas monedas griegas del siglo IV al III a. C.
- Las copias de algunos paneles de la Puerta de Bronce del Santuario, reproducidos sobre bloques de piedra (siglos XVII – XIX).
Otro sector del museo comprende objetos y testimonios de la religiosidad popular de los habitantes de la ciudad y de todo el Gargano. Son de admirar las llamadas campanas de vidrio que protegían las estatuas de santos, y que antiguamente ocupaban un puesto de gran respeto en las habitaciones, una serie de estatuas que representan a San Miguel, esculpidas en piedra gargánica o alabastro estatuario que, por tradición familiar, se trasmitía de generación en generación, según el privilegio concedido por Fernando de Aragón a los artistas de Monte Sant’Angelo en 1475.
También encontramos otros objetos adquiridos recientemente como:
- Diversos vasos y cerámicas pintados por la escuela abruza
- El Nacimiento de Jesús esculpido por los artistas de Ortisi (Bz)
- Una serie de estatuillas realizadas en cuero que reproducen escenas de la vida familiar y una peregrinación al Gargano.
- Un hábito votivo de San Miguel.
- Una serie de copas y rollos con representaciones de San Miguel.
Otro sector interesante del museo está constituido por una colección de íconos de la Beata Virgen María y de santos proveniente de la escuela rusoeslava y por copias e íconos custodiados en Grecia, inspirados en la figura de San Miguel.
También es importante una colección de cirios votivos decorados.
Pero el puesto central pertenece al más antiguo ícono de San Miguel Arcángel venerado en el Santuario. Originariamente, a fines del año 1891, se encontraba en la llamada Cueva de las Piedras, después fue colocado por un tiempo en la Capilla de las Reliquias. Esta obra de gran valor fue realizada en cobre dorado y es conocida como el ícono bizantino del siglo VI-VII pero, según los estudios recientes, su origen viene asignado a la época longobarda (siglos VIII-IX). Todas estas donaciones ofrecidas al Santuario de Monte Sant’Angelo testimonian el amor, la devoción, el culto a San Miguel a través de siglos y atestiguan la vitalidad y la imporatncia del lugar para tantos peregrinos provenientes de diversas partes del mundo.